Etiquetas

jueves, 13 de octubre de 2011

Prueba Seat 124 Sport

Tras estos días de clásicos todavía recientes en nuestra memoria, os ofrecemos la prueba de un icono español, uno de los pocos coches nacionales que verdaderamente tienen carácter de deportivo tradicional. Y para ello contamos con un Seat 124 Sport de los más cuidados y mejor restaurados que hemos visto nunca.



Lo primero, quiero empezar con excusas: Ayer, día festivo, los planes eran pasar una soleada mañana en la frutería trasteando y terminando de cambiar el motor al Honda Civic Type-R, y alguna que otra chapucilla que nos queda pendiente en el Corrado G60. Pero de repente se presentó allí nuestro amigo Javi, con su flamante 124, y nos tentó diciendo si le hacíamos una prueba... No puedes dejar pasar una oportunidad así, y la hicimos, pero no teníamos a mano ninguna cámara de fotos, así que tuvimos que hacer lo posible con el móvil. Intentamos captar todo detalle posible, pero insisto, lo que hay es lo que hay, y en otra ocasión intentaremos hacer una sesión de fotos como se merece un coche tan glorioso. Así que ahora nos metemos de lleno en la prueba del aparatejo en cuestión:

El Seat 124 Sport es de sobra conocido por todos, un mito de los años 70 en España, el deportivo que tenían los más chulos de la discoteca, con tracción trasera, frenos de disco, 5 velocidades, y un impresionante motor 1.600 con doble arbol de levas y 110 cv. 


La unidad que nos deja Javi está recién restaurada hasta el más pequeño detalle: Toda la chapa rehecha y pintada, los interiores recién tapizados, volante deportivo de la época, suspensión Koni regulable hecha a medida, llantas con garganta tipo old-school, carburadores dobles y línea de escape de las que suenan crujientes y bonitas. Cada pieza del motor ha sido restaurada o pedida nueva, utilizando hasta 3 motores para poder completar el que lleva ahora el 124. Tiene sus achaques, claro, por eso hay dos relojes que no funcionan (revoluciones y temperatura de agua, aunque el RPM va sustituido por otro adicional), y el coche tiene las holguras lógicas de un coche sin silent-blocks de hace varias décadas. Por lo demás, es un capricho, pintado en su rojo-rally original ultra-brillante, y una máquina de girar las cabezas de todos los peatones.


Te metes en su habitáculo, que por estar tan bien reconstruido no huele a viejo, y te abrochas el cinturón de seguridad de tipo avión. Es pequeño por fuera pero espacioso por dentro, te acomodas a gusto en seguida. Giras la llave, embrague pisado y bombeando el acelerador, y el motor 1.600 despierta con un rugido ronco y profundo. Empieza a temblar el coche entero, y es que parece un motor V8 en miniatura, el sonido de su escape y sus carburadores te pone la piel de gallina. Todo tipo de "brums", "pops" y "zums" salen aleatoriamente del motor, y empiezas a darte cuenta de que tienes delante un motor serio, de los de antes, de aquellos héroes que volaban por las carreteras de montaña en los rallyes regionales con el sonido de una época dorada de coches de carreras.


Es un motor con mucho carácter, y te llaman la atención infinidad de peculiaridades: La respuesta del acelerador de cualquier motor carburado es siempre inmediata y sorprendete, pero cuando llevas esos carburadores y ese escape, la sensación se multiplica. Incluso su dueño nos enseña un truquito para disuadir a los listos que se pegan detrás con su 320d: girando el contacto en marcha apagando y encendiendo el motor, y se produce una auténtica verbena de petardazos y hasta llamaradas por el escape, que obliga a tu perseguidor a tomar cierta distancia, y enterarse de que lo que lleva delante es un coche serio. Pero también tiene su lado negativo. Si en un coche de carburación normal, muchas veces la carburación da problemas y se sale de punto, en el 124 Sport esos casos producen una serie de explosiones y fogonazos por los carburadores, que hacen que incluso veas las llamaradas salir por las tompetas debajo del capot (con la consiguiente mancha de quemadura negra). Todo en este coche es mítico, incluso lo malo.

Es un motor de bajos y medios, en altas no tiene la respuesta de los coches modernos, pero como sus marchas son bien cortitas, sacarle partido por las curvas a su motor es una delicia de empuje y decisión. Y aquí entra en juego la gran baza de la jornada: Las curvas con el 124.


Su chasis es bastante decente para un Seat de la época, y el nuestro lleva Koni's, y unos ruedones Toyo bastante serios, por lo que su paso por curva es realmente espectacular. Para hacer chillar las ruedas tienes que ir realmente rápido, forzar mucho, incluso balancear un poco el coche apoyando. Tal es así, que no me parece que el Clio Sport que tenemos pase más rápido por curvas lentas y rotondas, ayudado por un peso pluma y una altura bastante escasa, que hacen que el 124 sea tu nuevo juguete de tramos favorito. La frenada, mejorada en el Sport con frenos de disco en las 4 ruedas, no es espectacular, pero sí correcta para un coche de sus características. Nosotros hemos ido bien fuerte largo rato, y no hemos tenido problemas con los frenos.


Pero sí hemos tenido problemas con la dirección. Es el gran problema de estos coches, pues comparten el sistema de dirección por "tornillo sin fin" de los 1430, un sistema sin cremallera que simplifica ligeramente las cosas, pero tiene unas holguras y una respuesta totalmente lamentable. Y Javi nos cuenta que hubiera montado un sistema de cremallera sin dudarlo, pero que no es nada fácil porque habría que diseñar unos nuevos colectores de escape que no chocaran con la nueva dirección, y la cosa se iría complicando demasiado. Este problema endémico de todos los 124 y 1430 es lo único que los separa de comportase como un kart. Si tuvieran la inmediatez de respuesta de una dirección convencional, sería el aparato definitivo. Sin duda.


Y es que un día como ayer, soleado, festivo, con aire fresco en la cara, y un Seat 124 Sport por la sierra, con su pintura roja reluciente y su rugido resonando por la Sierra de Madrid, es un placer bastante difícil de igualar. Por esas mismas carreteras hemos pasado con deportivos actuales de mucha más potencia, pero no os voy a explicar la diferencia, porque ya la comprendéis. Con el Seat vas viviendo otra época, toda la ambientación con sus relojes, su cuero, su tacto y su sonido es como si vivieras en la España del Torete y el Vaquilla. Con otros coches te mira la gente como siempre, como a un chaval que va en un coche que tiene pinta de correr. Pero con el 124 la gente te mira con descaro, señalan con el dedo, y te hacen fotos con el móvil. Los demás coches cuando te ven llegar se apartan, y muchos de los que te adelantan lo hacen despacio para ver bien el coche. Con el 124 por la montaña, ruidoso, cambiando de marcha con decisión, y pasando rápido en cada curva, te sientes un piloto antiguo sacado de época, y esa sensación no te la puede dar hoy en día nada que no sea un Caterham.

¿Se nota que nos ha enamorado?


Pues todo tiene su cara y su cruz. Es cierto que el motor empuja y el coche corre, pero no olvides que son 110 cv. Y no me vengas a decir que si son caballos de los de antes, y que corren más, porque son 110 cv al fin y al cabo, en un coche ligero y con carburadores que ayudan mucho, pero no esperes una aceleración o una respuesta impresionante. También ten en cuenta que aunque sea propulsión, su trasera no desliza facilmente. Es un coche ligero, con un motor pequeño (olvida el power-over) y calzado con unas ruedas blandas como chicles. Si quieres cruzarlo tienes que hacer mucho el animal, montarle gomas más modestas, y jugarte el tipo con su diferencial abierto y su dirección imprecisa como hemos mencionado. Es un coche para ir trazando fino, rápido y por la línea correcta, disfrutar de su sonido orgánico y chisporroteante, y verse reflejado en los cristales de los escaparates con una sonrisa en la cara. Para ese tipo de cosas, es el coche ideal. Si quieres hacerlo correr de verdad, puedes prepararlo en condiciones, con el inmenso catálogo de piezas de carreras que hay para estos modelos, pero sinceramente pienso que es mejor correr con un coche más reciente, y dejar estas joyas para disfrutar de lo que son.

Sin duda ha sido el mejor plan improvisado de los último años. Bajarse del coche y salir por la puerta es como pedirle a un niño que apague la consola para irse a dormir.



25 comentarios :

  1. No sé si conoces el artículo que hicieron tus compañeros de 8000vueltas:

    http://8000vueltas.com/2011/08/17/seat-124-sport-1800

    Se quejaban, en la época, también de la dirección y sus frenos. Saludos, los leo siempre.

    ResponderEliminar
  2. Un Deportivo español que yo no conescia! Lindíssimo, encantador! Las lineas sedutoras, y esta cor roja..hummm! Un cockpit de época, simples y funcional... creo que un volante Nardi ficaria mas interessante jeje..El sonido deste ''pequeño'' 1600 creo ser algo único. Imagino que a relacion peso x potência deste coche és muy buena tambiem...dando asi agilidade y aceleracion rápida como un tiro! Interessante la caja de 5 velocidades! este Seat és algo parecido como los míticos Alfa Giulia y Sprint veloce de los años 60!

    Henrique - Brasil

    ResponderEliminar
  3. M.Sport: Pues mira que somos amigos de la gente de 8000vueltas, y no había leído ese artículo. Es curioso, documentación fuerte sobre el tema y tal. Nosotros normalmente obviamos ese tipo de información, y preferimos pasar a la prueba del aparato en sí. Fiarte de la documentación y las cifras suele inducir a errores, y por esas cosas ya nos hemos comprado algunos coches míticos que han terminado en gran decepción. Lo dicho (que me enrollo), yo prefiero probar y pasarmelo buen.

    Henrique: El nardi no se puede poner por incopatibildad con el adaptador del volante y sus tornillos, pero el que lleva es de la época y es bastante bonito (nosotros tenemos el mismo en nuestro Seat 1430).

    ResponderEliminar
  4. Simplemente precioso. Enhorabuena a Javi por su tiempo, dinero, esfuerzo y dedicacion. Me llena de orgullo ver que buenos coches se han hecho en este país. Un saludo y seguid asi

    ResponderEliminar
  5. La verdad,en persona impacta mucho mas.Y solo hay que ver la cara de felicidad que tenias al arrancarlo xD.incluso cuando se te calaba eras feliz jajajajjaa este coche es otro rollo completamente y solo con verlo ya sabes que corras o no corras vas a ir con la sonrrisa tonta xD.Y ya si paras en una campsa y te compras la cinta de los chichos...........

    Gran coche y muy muy cuidado.Asi da gusto!!!

    ResponderEliminar
  6. Cada vez veo más hermosura en estos coches, pero claro en España ya sabéis lo que se lleva, el Truñing, por que Spain is diferent!, jajaja ojala se vieran más joyas de estas por las calles y no tanto Xsara, Bravo, 307, y un sin fín de modelos más truñeados. Seguid así!

    ResponderEliminar
  7. Una pregunta!! la fábrica vino a ofrecer a los propietarios, paquetes deportivos para la preparación de motores, cajas de cambios y suspensiones? ¿Cuáles fueron los paquetes para la optimización de los motores disponibles en este momento?...

    Henrique - Brasil

    ResponderEliminar
  8. Indeciso: La verdad es que sí, nunca pensé que me sentiría orgulloso de un coche patrio, pero con estos cacharrillos te enamoras en un segundo.

    Culebras: Es que se te pone sonrisa tontorrona en cuanto giras la llave! Es instantáneo! Aunque se me calara la primera vez, hasta eso mola.

    Enrique Barrios: Bienvenido y gracias por comentar. Es lo de siempre, ya se sabe, es difícil (y caro) saber llevar coches con clase y no las típicas montañas de masilla que nos rodean.

    Henrique: Desconozco el pack oficial. Sé que Javi tenía las suspensiones deportivas aftermarket que vendía el fabricante oficial, unas Abarth firmadas por Koni, y que los colectores de escape eran Vimesa (empresa que tiene gran tradición preparando este tipo de coches). El resto no lo conozco.

    ResponderEliminar
  9. Ya me encantaba de pequeño y ahora lo veo inalcanzable. No hay mas que ver como se cotizan estos cacharrillos. Ademas el 1.6, que decian que era mas rabioso que el 1.8. Quien pudiera...

    Por cierto (modo GAYER ON), me estoy dando cuenta que tenemos muchos (demasiados) gustos en comun, y un dia de estos la jefa me manda con las maletas a la futería.

    ResponderEliminar
  10. Sin duda una maravilla, lo vi al natural y coincido con Culebras, daba gusto verte la cara!!!

    ResponderEliminar
  11. Jas: El 1.6 llevaba árboles de levas más agresivos y carburación más bruta. La combinación buena era esos elementos del 1.6 pero con la cilindrada del 1.8
    Sobre tu salida del armario, te diré que de momento en la frutería se está a gusto, pero en un mes empezará a hacer una rasca bastante importante.

    Rafa: Veo que me teníais que haber hecho una foto a mí en vez de al coche!

    ResponderEliminar
  12. Una foto a el? Pero si siempre sale con la misma cara verde!!

    ResponderEliminar
  13. La primera vez que lo vi no se me olvidará, en cierto rally spring en Villalva, yo casi estrenando coche y babeaba mas por ese....es "EL DEPORIVO DE LA EPOCA"

    ResponderEliminar
  14. Yo tuve la ocasión de conducir uno bien restaurado pero sin preparar, y sentí exactamente lo mismo que describís. Parece que me leéis el pensamiento. Me encanta el coche.

    ResponderEliminar
  15. Muy buena prueba, como siempre! En cuanto al coche tiene que ser una pasada, que os enamore con tantos años encima dice mucho de él, me imagino lo que disfrutaría la gente de la época con este coche.

    ResponderEliminar
  16. Pues sí por lo que decís se ve bueno el cochecito. La mejor baza de este coche es el peso pluma y aunque no tenga mucha potencia al menos puede ir alegre y eso de ir echando fuego por el escape y tal lo hacen muy encantador a este pequeño diablo. Lo único malo es el tema de que no derrape bien, si lo hiciera podría hacer un muy buen mano a mano contra un toyota ae86 ¿no creeis?

    ResponderEliminar
  17. Este coche lo tuvo mi abuelo hasta que mi tio lo... volcó (debe se tradición familiar) Yo no pude catarlo, yo era un moco, y la verdad q en aquella época tan solo me gustaba el coche y no sabria deciros nada sobre él. Solo recuerdo el sonido "roto" al acelerar y el olor a gasolina de carburador que se quedaba en el garaje.

    Porcierto, felicitar al dueño porque ese coche es un arrebata miradas de los de verdad.

    ResponderEliminar
  18. Jas: Es mi mejor perfil...

    TecnicaF1: Me alegro de haber descrito las sensaciones al pie de la letra y que hayamos acertado! ¿Te gustaba cómo vibraba al ralentí? XD

    Alvaro Ruiz Pizarro: Es que es un juguetito, piénsale: Rojísimo, ruidoso, rápido, llamativo...

    Miguel Ángel: Cualquier coche de su época es malo para derrapar. Los Ae86 tienen 10 más que este coche. Serían más parecidos a un E30 318is, por ejemplo. Por otra parte, según dicen, el AE86 de estricta serie no te creas que es ninguna maravilla.

    Mr.Peach: No pienso dejarle un coche a nadie de tu familia en la vida! Menuda tradición!

    ResponderEliminar
  19. Hombre, sí pero también es verdad que hay coches que vibran de forma más natural y bonita aún llevando silents bloks. Se me ocurre un morgan o un Triumph TR3 o un 901 de porche.

    ResponderEliminar
  20. Me encanta como trasmitis las sensaciones al volante. Un articulo genial, como siempre!!

    A ver si le cambio las gomas al e30, porq estan q parecen slicks (literalmente) y me paso a veros un dia a la fruteria!

    ResponderEliminar
  21. Despues de leer cada prueba dan ganas de empezar a buscar coches de segunda mano.
    Unas explicaciones geniales, de las que generan envidia sana.

    ResponderEliminar
  22. el cuadro esta bien?

    ResponderEliminar
  23. Muy buen reportaje, que alegría me he llevado cuando he visto que se trata de mi 124 Sport, se lo compré a Javi en 2015

    ResponderEliminar
  24. A mi también me alegra de ver este reportaje y ver que soy el afortunado de tenerlo yo ahora. Es verdad ruge y acelera como una bestia.
    No me arrepiento de a verlo comprado.
    Si Javi es el que lo restauró me encantaría contactar contigo.

    ResponderEliminar

¿Alguna objeción, súplica o ruego?