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miércoles, 9 de diciembre de 2009

Prueba Renault Clio Sport 197

Hoy tenemos otra nueva prueba, y como excepción, se trata de un coche reciente (pero tampoco nuevo nuevo). Su miticidad es tan grande, que siguiendo aún en fabricación, se ha convertido en icono de la deportividad y la diversión democrática. Hablamos del Clio Renault-Sport 197.



(Sólo un casco es necesario para salir a disfrutar este coche con dignidad a cualquier circuito, el resto viene incorporado de serie)


El panorama es el siguiente: Una unidad con 11.000 Km, de estricta serie y sin más extras deportivos que las llantas blancas de la Copa Clio que monta en opción. El Circuito de Kotarr (junto a Aranda de Duero, Burgos) nos espera con una mañana de nubes y claros. Yo personalmente tengo las expectativas muy elevadas por todo lo que se ha dicho y escrito sobre este pequeño deportivo. Muy bien lo tiene que hacer para impresionarnos, habiendo leído cosas realmente increibles. Nos ponemos el casco, salimos por el Box 3 y entramos en pista. Y tras una vuelta de calentamiento...

La primera sensación que nos ofrece el Clio es la de una respuesta instantánea, con unas marchas muy cortas y una entrega de potencia lineal. Un ligero empujoncito del motor al pasar las 5.000 rpm es lo único que notaremos en su aceleración hasta el corte. Nos acercamos a la primera curva y al pisar el freno nos parece que el tiempo se detiene. Una mordida de sus pinzas Brembo de 4 pistones y nos clavamos en el asfalto. Animados por esta sensación y este "colchón" de seguridad, atacamos el siguiente giro con mayor decisión, de hecho tanta, que nos pasamos unos metros, pero da igual, el pequeño Renault responde al giro de volante con obediencia y se mete en la curva sin rechistar demasiado. A ver cuánto nos dura la broma de las frenadas "in extremis"...



Tras unas pocas vueltas, nos animamos. Comentamos ambos probadores que es un coche muy fácil de llevar rápido, y que sobre todo resulta sencillo para manos expertas sacar tiempos vuelta tras vuelta, y es que con una puesta a punto tan equilibrada, en cada curva siempre puedes columpiarte un poco más, e ir metiendo décimas al crono una a una. Con la electrónica activada no parece que nos reste mucha alegría, al menos en una conducción convencional y trazando líneas "de libro". Efectivamente si probamos a frenar a fondo en apoyo, meter el coche en las curvas por encima de los pianos y colocarlo "a capón", los controles hacen cosas raras, pero nada que se salga de lo normal y sin grandes intervenciones. Al desconectarlo, y confiando en que conocemos bien el coche, comenzamos a ir realmente rápido. Tanto, que adelantamos a un Accent de la Copa entrenando sin demasiada dificultad y sin arriesgar más de lo prudente. Y entonces, nos sentimos pilotos, entonces miramos el coche de carreras en el retrovisor, detrás, vencido, y nosotros escuchando el rugido de nuestro motor desde dentro del casco, y de manera inevitable, los problemas vienen en forma de trompo:

En una bajada, llegando ya casi a la recta de meta, una sucesión de curvas muy complejas nos sorprende, con un charco (que creíamos que era nuestro amigo), en plena frenada en apoyo pisando un piano. Ningún control electrónico del mundo puede solucionar un trompo así en esas condiciones, así que nos resignamos a disfrutar viendo pasar el paisaje de lado, por las ventanillas, dando saltitos laterales por el pasto, mientras el Accent de carreras nos pasa con relax, y de paso un par de coches de regalo. Parados ya en el barro, bajamos los humos, guardamos la soberbia en la guantera, y volvemos a pista.

Continuamos experimentando con el coche, pues parece no tener fin. Los frenos somos incapaces de freirlos, siempre muerden, siempre paran el coche, siempre nos salvan de un error... Y hasta forzando las frenadas por encima del ABS, la neutralidad de la frenada es deportiva. Primero un poquito de morro, luego un poquito de atrás, mínima corrección y seguimos adelante. ¡Así de sencillo! Cuando nos queremos dar cuenta, el coche nos ha atrapado, se ha convertido en un vicio. Es como ese videojuego que teníamos de pequeños, que cuando nuestra madre nos decía "apágalo ya" no podíamos dejar de jugar unos segundo más. Y es que cuando el chasis es tan bueno, y la puesta a punto tan trabajada, uno no puede negarse a dar otra vuelta a ver si es capaz de pasar más rápido por tal sitio, o a "casi meto tercera antes de aquella curva pero ahora lo consigo", o a "puedo frenar 5 metros más tarde en esa horquilla", a "esa chicane la puedo pasar casi recta si entro con más ángulo"... y así por siempre.



(Nótese la "decoración" lateral del coche después de nuestra excursión campestre...)


La conclusión es que el coche realmente se merece su fama, se merece todas las alabanzas que le han brindado compañeros antes que nosotros, y que sin duda pasará a la historia por los completo que resulta en todos los aspectos. Ponerle una pega es complicado, tal vez, que el acelerador queda un poco abajo para hacer el punta tacón con soltura, o que el volante de inercia puede ser un poco pesado a la hora de dejar de acelerar bruscamente (parece que sigue girando a fondo un instante después de soltar), pero son cosas realmente nimias, y que llegado el caso se pueden cambiar con facilidad. Además, los consumos combinados de la prueba, tanto del trayecto por carretera a velocidad legal, a las duras pruebas de circuito durante más de 4 tandas a fondo de 20 minutos, se quedaron al final del día en 12 litros, que no está nada mal para un coche de 197 cv. forzado al límite... Por algo más de 20.000 euros, nos llevamos a casa un deportivo de órdago, un coche noble, y un utilitario funcional. Renault-Sport lo ha vuelto a conseguir. Este Clio pasará a la historia.

¿Se nota que nos han convencido?


Breve Ficha Técnica:
Motor: Delantero transversal, 4cil 16v, DOHC. Distrib variable e Inyección Directa.
Cilindrada: 1.998 cc.
Potencia y Par: 197 cv @ 7.250 rpm. /  215 Nm @ 5.550 rpm.
Transmisión: Manual de 6 vel. Tracción delantera.
Aceleración 0-100 kmh: 6,9 seg.
Peso: 1.315 Kg.
Frenos: Delanteros 312mm (pinzas 4 pistones), Traseros 300mm (pinzas monopistón).
Rueda: 215/45 R17



Nota de la Edición: En breve podremos acceder a más fotos que hicieron fotógrafos externos a FW, esperamos tener pronto más material para ofreceros en una segunda entrega. Permaneced atentos...